Los agentes sociales debaten sobre la sostenibilidad de las pensiones
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Representantes de CEOE, CEPYME, CCOO y UGT han conversado sobre la sostenibilidad del sistema de pensiones en el seno de las Jornadas que la Intervención General de la Seguridad Social ha organizado para conmemorar su 40 aniversario. Todos coinciden en la urgencia de recuperar el consenso en el seno del Pacto de Toledo y en la importancia de resolver el desequilibrio financiero del sistema.
Jordi García Viña, director del Departamento de Relaciones Laborales de CEOE
“Gastamos más de lo que tenemos”, ha asegurado el representante de CEOE en las jornadas. Su organización apuesta por subir los ingresos de la Seguridad Social sin subir cotizaciones, vía transferencias del Estado. La creación de empleo y la lucha contra la economía sumergida serían otras de las herramientas para incrementar los ingresos de la Seguridad Social. Asimismo, la patronal apuesta por medidas de apoyo a las familias.
Sobre la jubilación, CEOE propone eliminar la jubilación anticipada y, en su lugar, implementar una política laboral específica para trabajadores de más edad. Por otra parte, García Viña ha asegurado que es necesario que “los planes de pensiones sean más atractivos. Para ello, deben ser más flexibles, se tienen que eliminar controles y tienen que tener una mayor rentabilidad”.
Carlos Bravo, secretario confederal de Protección Social y Políticas Públicas de CCOO
El representante de Comisiones Obreras ha puesto el foco en “los retos del envejecimiento digno”. “La sostenibilidad es un debate fundamental, pero no debemos olvidar tampoco de lo que estamos hablando. La esperanza de vida en buena salud a partir de los 65 años es de 9 años. A partir de ahí, nuestras necesidades en pensiones, sanidad y servicios sociales son cada vez mayores”, ha explicado. “Consideremos que la principal fuente de financiación de todo esto es el salario, ya sea vía IRPF, IVA, cotizaciones, o cualquier otro impuesto. Y consideremos que los salarios se han devaluado”.
Bravo asegura que “por la configuración de las Cámaras de representantes es poco probable que se consiga un acuerdo integral de reforma en el Pacto de Toledo, pero al menos se tendría que recuperar el consenso en su seno, roto con la reforma de 2013. Hay que llegar a un acuerdo sobre el equilibrio financiero y las vías de financiación y revertir las consecuencias de la reforma de 2013, que como consecuencia va a tener pensiones mucho más bajas". "Y la solución a eso no puede ser el “arréglese usted mismo”.
Teresa Díaz de Terán, directora del Departamento Socio-laboral de CEPYME
La representante de CEPYME, que representa a las pequeñas y medianas empresas, ha puesto de manifiesto que los últimos datos son buenos, "las cotizaciones sociales crecen 5,16% y las pensiones contributivas 3,4%", pero "no es suficiente para compensar gastos e ingresos". Por eso se ha mostrado tajante a la hora de decir que "hay que modificar el sistema de Seguridad Social. Es una prioridad. Se puede hablar de la convergencia de regímenes especiales con el régimen general, de modificar la edad de jubilación, y otras medidas. Pero es importante modificar el sistema cuanto antes para que se puedan repartir los recursos que se tienen, como responde a un modelo de reparto".
Por otro lado, "las prestaciones no contributivas no las tiene que financiar la Seguridad Social". CEPYME propone, por ejemplo, que el complemento a la pensión de las mujeres se financie con recursos ajenos a las cotizaciones. Además, hay que controlar el gasto en incapacidad temporal y contingencias profesionales y estimular los planes de pensiones.
Carmen Barrera, política social, empleo y Seguridad Social de UGT
UGT resume los problemas de la Seguridad Social en tres. El primer problema sería financiero, que su representante cifra en "el desequilibrio actual, que sólo con empleo no se va a arreglar". El sindicato plantea que "para afrontarlo hay que corregir y clarificar la estructura de gastos de la Seguridad Social: que pague lo que debe y no pague lo que no debe. Cuando las cotizaciones eran muy altas, no hacía tanta falta, pero ahora es urgente. El Estado tiene que hacer frente mediante transferencias de los gastos que le corresponde. Así se acabaría con el déficit estructural".
Otro gran problema es qué hacer con la jubilación de la generación del baby boom, "a la que se le debe en gran medida la prosperidad de este país en las últimas décadas, entre otras cosas en el crecimiento del PIB", apunta. "La reforma del 2013, que topa el gasto en pensiones, se resume en si hay más pensionistas, que cobren menos pensión". "Si es una prioridad, se podría gastar un porcentaje mayor del PIB en pensiones. Pensar en qué tasa de reemplazo queremos y qué otras características tendrían que tener las pensiones públicas para llegar a un gasto como el que consideremos y podamos asumir".
El tercer gran problema, para UGT, es "la ruptura del consenso en el 2013 con una reforma que cambia la naturaleza del sistema de pensiones, cuando de una pensión que es el 80% del último salario vamos a pasar a una pensión de poco más del 40%".